Muchas veces, cuando se necesita otorgar protección ante el fuego, nos enfrentamos a diversos condicionante. Por ejemplo, puede que sea de mucha dificultad la correcta aplicación de pintura o morteros, o que se requiera determinada estabilidad o resistencia contra el fuego. Incluso, puede necesitarse que el acabado final sea excepcionalmente bonito, priorizándose el mismo sobre la parte económica. En todos estos casos, se tiene como opción la colocación de paneles con placa rígida. A continuación, te mostrados los dos tipos:
Paneles de cartón y yeso
Estos paneles se encuentran compuestos con alma de un yeso especial, que a su vez está recubierta por láminas de fibra de vidrio no combustible, convirtiendo al panel en un conjunto de enorme rigidez. Son adecuados para las soluciones de protección contra el fuego con una altura hasta 9 metros. Los paneles de cartón y yeso, presentan un acabado liso con tonalidad blanca. Se le puede dar un acabado final con pinturas o alicatados, ya que ninguno altera la naturaleza incombustible del panel.
Paneles de fibrosilicados
Se trata de un panel estructurado por los silicatos cálcicos con fibras inorgánicas que aportan refuerzo y resistencia ante fuego. Durante la creación de este tipo de paneles, son sometidos a un tratamiento de elevada temperatura, otorgándoles una magnífica estabilidad en momento de incendio.
El comportamiento mecánico de los paneles de fibrosilicados es bastante bueno, pudiéndose instalar en la obra por medio de tornillos, clavos o grapas y sin ningún inconveniente. Posee un acabado liso con tonalidad en blanco-marfil. Para el acabado final, estos paneles pueden pintarse con el fin de integrarlos al conjunto estético de la edificación
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